Hace algún tiempo una orca conmocionó al mundo entero por el duelo que realizó al perder a su cría. Según las imágenes tomadas, el animal sostuvo el cuerpo sin vida durante 17 día.
Los expertos llamaron a este ritual el “tour de luto”. El significado detrás de este es mostrar una señal del “vínculo y el cariño increíblemente fuerte” entre la madre y su descendencia.
Dos años más tarde, el Centro de Investigaciones de Ballenas, de Canadá, compartió una buena noticia, la orca volvió a ser madre y ambas fueron vistas nadado con la manada en el Estrecho de Juan De Fuca.
Según el portal 20 minutos, el 5 de septiembre pasado identificaron a la cría y a Tahlequah, también conocida como J35. “Todavía era capaz de producir una cría viva después de una gestación de aproximadamente 18 meses! ¡Hurra!”, declaran en un comunicado.
La cría, a la que bautizaron como J57, está sana y nada con fuerza junto a su madre, según informan los investigadores, que prevén que podría haber nacido el 4 de septiembre “porque su aleta dorsal estaba erguida, y sabemos que tarda un día o dos en enderezarse después de estar agachada en el útero”.
