El pasado 11 de otubre, en la localidad de Mariano Acosta, del partido bonaerense de Merlo, encontraron en un descampado el cuerpo de Nicolás Alexander Cernadas, de 13 años, calcinado y con varios cortes profundos. En ese marco, en las últimas horas, el Juzgado de Garantías del Joven 2 de Morón, a cargo de la jueza Karina De Lucas, que trabaja en el caso, dictaminó prisión preventiva para uno de los agresores y quedará recluido en el Centro Cerrado Almafuerte de La Plata.
Se trata de un adolescente de 17 años acusado del crimen del chico de 13 años. Además, otro joven de 14 años fue detenido por ese mismo hecho, y si bien fue sobreseído debido a que es inimputable por su edad, quedará alojado en un centro educativo de menores durante seis meses y luego se lo evaluará semestralmente.
Días atrás, se conocieron los escalofriantes chats, en donde reconocen su participación. En una de las capturas tomadas de ese diálogo, ambos aseguran estar preocupados por ser descubiertos: “Pero queda el cargo de conciencia”, resalta en el ida y vuelta,
En una segunda captura de pantalla del celular de uno de los asesinos, la charla continúa pero en esta oportunidad, el cuerpo de la víctima ya había sido encontrado: “Gato. Mirá. Ya. Ya. Lo encontraron en la zona donde lo dejamos”, como respuesta ante tan noticia, el segundo implicado responde: “Ya está, cagamos”.
En cuanto al crimen, de acuerdo a los investigadores, se estableció que el ataque fue planeado porque le tenían “bronca y odio” a Nicolás. Asimismo, luego de realizar la autopsia correspondiente, determinaron que la muerte del menor de edad, se produjo unas 24 horas antes del hallazgo, posiblemente el domingo por la tarde.
Junto con ello, remarcan que la causa de su deceso fue un paro cardiorrespiratorio traumático ocasionado por lesión alveolar difusa y por energía calórica, es decir que perdió la vida por los cortes y tras ser prendido fuego aún vivo.