La fábrica de dulces regionales de Simoca que inauguró Alberto Fernández en su visita a Tucumán el 11 de octubre funcionó durante sólo un día. La empresa Dulky iba a producir dulce de batata, pero no hay materia prima.
La planta se encuentra cerrada y aseguran que sólo funcionó el día de la inauguración. Se conocía que en ese momento no estaba en condiciones de ser habilitada, pero se agilizaron los tiempos debido a la visita del Presidente.
Había asistido a la inauguración el reciente Jefe de Gabinete, Juan Manzur; el gobernador interino Osvaldo Jaldo; y el intendente Marcelo Herrera, que condujo el sulky que paseó al Jefe de Estado por las tierras de Luis Miguel Rodríguez.
Incluso los dulces que se probaron ese día no eran de la fábrica, sino de otra productora local, de Verónica Segovia.
Según habían anunciado, la planta de Dulky, equipada con tecnología de la industria alimentaria de última generación, generaría empleo para más de 100 personas de forma directa e indirecta.
La fábrica incluye 750 m2 cubiertos, tiene un mínimo de producción de 700 kg/h y un máximo de 1000 kg/h.
Además, aseguran que no hay producción de batata porque si bien se debe cosechar en octubre y noviembre, en la zona no estaban preparados para satisfacer esa demanda.